jueves, 15 de octubre de 2009

μg¬



Revives dentro de mi como bajo molécula raíz impar
tierra blanda, me gusta tu sonrisa geniecilla
universo derrumbándose a trozos silenciosos como fuego artificial
celebrando la tela marina, oscuridad lejana
revelación fría cavilando
luz de faro perdida entre oleaje domesticado

ve a dormir atenta frustración a diario,
vamos a correr desaforados desgañitando el coraje,
valor a la tertulia, atención a las pequeñas decisiones,

secreto del cosmos desarrollando razonamientos triviales en los cuales el humano rebusca y no en espiral, barrocas las manos serpenteando sobre tu cuerpo, ramal torcido descubriendo vórtice selvático, delta tu piel tocada por rayo de sol, besos tropical, arenosos glúteos suaves de tono similar al tostado bolillo de las costas del golfo y tus piernas largas aparentemente fuertes pidiendo desaparecer el tinte del harina francés, bodegón tu cuerpo del que tomo por doquier el aguamanil de tus besos, robo la oscuridad del vacio que alguna vez te unió a tu madre de tierra caliente, de ese manjar bebo transparente néctar de la tuya cascada librando oleaje en malecón; frontera la veta donde comienzas y terminas, circulo por la fronda de tu cuerpo moreno, imagino reposar mientras una manada furiosa mi boca se prende de tu olor y como parvada sobre arbolada busco refugio al caer la noche, me hinco en ti, adentro no conoce razonamiento afuera eres brevedad de halitos rítmicos, arrítmicos tus ojos desconocidos, parpados meciéndose como vestido alborotado por el viento, que desconcierto al saberte con ese sabor membrillo que mana de la vaina, que raro es este sentir asolado, pues hace semanas que el bodegón no es retocado, hace días que un olor extinto mueve el eco donde te busco a diario, que extraño pues aun sabiéndote tan incierta, desconocida, bañada en mi incertidumbre, vale la pena la espera que me aguardaste, todo tiene un tiempo, y sigo sin comprender la obligación de las acciones la naturalidad de las cosas, es como desconocer o tratar de fijar el punto exacto de inicio del mar y la coordenada ideal de donde el rio termina, infranqueable la unión de los opuestos, dulces y salados, calientes y fríos, concentrados y dispersos; se detiene naciendo la nueva vida